lunes, septiembre 19, 2005

Stardust

Hay veces en la vida que aspiramos a ser lo máximo en la vida, veces en las que nos dedicamos a esforzarnos para superarnos a nosotros mismos.

Esas veces cuando ya cansados del esfuerzo nos tumbamos a descansar nos convertimos en polvo de estrella.

El mismo polvo de estrellas del que se encuentran hechos los sueños. En esos momentos hacemos nuestros sueños realidad.

Recuerdo que siempre que se pone empeño en una cosa al final termina por hacerse realidad.

Gastamos tiempo y energía y convertimos todo ese esfuerzo en polvo de estrellas, que hace que nuestras ilusiones se conviertan en hechos.

Todos hemos hecho polvo de estrellas sin saberlo, ha veces lo usamos en una casa, en un coche, en un trabajo, o en un hijo.

Vamos haciéndolo con nuestro trabajo, y lo vamos almacenando en un saco que tenemos junto al corazón.

Hay veces que lo desperdiciamos utilizándolo en cosas vanas y sin sentido, pero que si lo tienen de manera transitoria, esas veces lo derrámanos sin pensar y después nos arrepentimos de haberlo hecho.

Os contare un secreto, yo tengo mi saco de polvo de estrellas lleno, lo guardo para completar mi vida, esta esperando para terminar un proyecto que demoro ya en demasía, la verdad es que tengo almacenado mucho, y esta vez no pienso desperdiciarlo, pienso entregárselo a las tres personas que mas quiero en este mundo.

Quiero entregarles mis ilusiones, mi trabajo y mi vida, ya lo hago todos los días, pero se que ellos, en especial una, apreciaran el esfuerzo que no solo yo hago, sino que ellos también realizan.
Voy a usar ese polvo de estrellas en convertir un sueño en realidad, voy ha hacerlo realidad en la tierra, y después lo llevare al cielo, lo transformare en una estrella y lo pondré junto a esa que desde el cielo vigila que cada día todos los míos sean felices, por que esa estrella lleva esperando mucho tiempo que ese sueño se convierta en realidad, y prometo hacerlo, por ella, por todos.

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